El sexo mis deseos y mi Dios ¿PodrÃa ser que nuestra creciente lucha interna con la pornografÃa y las fantasÃas, en realidad nos está recordando el profundo deseo de nuestro corazón, algo superior y más satisfactorio que el placer sexual?
De acuerdo con el consejero y lÃder pastoral Michael John Cusick, la respuesta es un rotundo sÃ.
Mediante ejemplos personales, ilustraciones vÃvidas de las Sagradas Escrituras, y con 20 años de experiencia como consejero,
Michael ayuda a los lectores a entender cómo empiezan las luchas internas con la pornografÃa, cómo evitarlas y, lo más importante, cómo superarlas al presentarse ese comportamiento compulsivo.
La liberación no es un proceso fácil con pasos definidos:
La pornografÃa representa el 25% de las búsquedas en la Internet.
El 70% de las visitas a sitios Web con contenido sexual ocurre entre las 9 a. m. y las 5 p. m., desde computadoras ubicadas en las oficinas
Más del 50% de los pastores evangélicos reconocen haber visto pornografÃa durante el último año.
Más del 70% de los cristianos varones reconocen haber visto pornografÃa durante el último año.
El sexo, mis deseos y mi Dios guÃa a los lectores por un camino claro que les permitirá entender cómo surgen las luchas internas con la pornografÃa, cómo distinguir entre el placer sexual y la intimidad, y cómo liberarse de las cadenas de esa prisión
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